En este blog podrás encontrar tres secciones en las que mostraremos actividades llevadas a cabo en el aula, actividades para hacer con vuestros hijos en casa y finalmente, una sección dedicada a profundizar en el aprendizaje de esta apasionante etapa del desarrollo de los más pequeños.
En clase seguimos trabajando esta estación tan bonita que es el otoño y en este caso hemos trabajado con los frutos típicos de esta época del año.
Imagen propia
Hemos aprendido de dónde proceden las castañas, las bellotas, las nueces y los madroños tan típicos en nuestra ciudad. Los hemos tocado, olido e ¡incluso probado!
Pero en esta ocasión también los hemos utilizado para hacer algo muy diferente y por un día, estos frutos tan especiales, se han convertido en nuestros pinceles y con ellos hemos pintado unas hojas preciosas que esperamos os gusten mucho.
Imagen propia
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Si os apetece es también una actividad muy divertida para hacer con los peques en casa en estos días de lluvia.
Ser capaces de hablar y de comunicarnos es algo que nos hace únicos a los seres humanos y frecuentemente es algo que como padres, y también maestros, nos preocupa cuando vemos que se da cierto retraso en los más pequeños a la hora de su adquisición.
Hoy os traigo en la sección de formación un artículo muy interesante que os puede ayudar a tener una idea sobre las distintas etapas en la adquisición del lenguaje de vuestros hijos o alumnos. Pero tenemos que tener en cuenta que cada niño es un mundo y tiene sus propios tiempos de desarrollo, por lo que cada uno puede adquirir el lenguaje de manera diferente y no por ello debemos preocuparnos.
A modo de resumen y para que podáis verlo de un modo un poquito más visual os dejo este mapa conceptual sobre el desarrollo del lenguaje.
Con motivo de la estación del otoño en la que nos encontramos, hemos hecho en clase un mural muy especial...
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Para realizarlo contamos con la ayuda de los alumnos, a los que pedimos la semana anterior que trajeran hojas típicas de esta estación del año. Ya en clase, y antes de que llegaran los alumnos, colocamos en el suelo todas las hojas, pusimos papel continuo encima y éste lo pegamos al suelo, de este modo cuando les explicamos que tenían que pasar los colores por encima del papel y ver qué pasaba, se quedaron muy sorprendidos al ver ¡¡cómo se iban dibujando las hojas!! Para ellos fue algo totalmente mágico.
Imagen propia
Como veis el resultado quedó precioso. Para hacerlo más otoñal aún usamos colores típicos como: rojo, naranja, verde... Os animo a probarlo, tanto en clase, si sois maestros, como en casa con vuestros hijos ¡pasaréis un gran rato!
Hoy de nuevo os traemos una actividad para realizar con los niños en estos días de puente. En esta ocasión vamos a trabajar sobre el conocimiento de nuestro cuerpo.
Gracias a la adquisición del esquema corporal vuestros hijos poco a poco irán formando representaciones mentales de su cuerpo y de las partes que lo conforman. De este modo, durante el primer año de vida se irán reconociendo como seres independientes de su madre o de su principal figura de apego. Más adelante, dicha idea mental les ayudará como marco de referencia y de orientación para poder moverse en el espacio que les rodea. A partir de los tres años aproximadamente el dominio de su propio cuerpo les permitirá ganar poco a poco mayor autonomía e ir realizando tareas por sí mismos como; bañarse solos, lavarse los dientes, vestirse, etc.
Por todo ello es muy importante trabajar el conocimiento de nuestro cuerpo con los más pequeños y como idea de actividad que podéis realizar en casa os dejo una recopilación de canciones en la que se trabajan las partes del cuerpo, podéis bailarlas todos juntos en casa, haciendo especial hincapié en cada una de las partes que se emplean en las canciones.
Después podéis presentarles un dibujo del cuerpo de un niño o una niña y que tengan que pintar las partes que vosotros le digáis, así pondremos sobre el papel todo lo que hemos trabajado con el movimiento.
Os dejo aquí dos ejemplos por si os sirven de ayuda.
En el post de hoy os traemos una actividad muy interesante para trabajar en casa con los peques. En estas edades, de entre 3 y 5 años, es muy importante saber identificar y poner palabra a nuestras sensaciones y percepciones. Para ir practicando podemos hacer en casa esta actividad tan sencilla con la que pasaremos un buen rato en familia y además nos permitirá trabajar con los sentidos y expresar con palabras cada una de dichas sensaciones.
Para llevar a cabo la actividad necesitamos:
- Agua caliente.
- Hielos.
- Piedras.
- Arena.
- Tornillos y tuercas grandes.
- Antifaz o cinta para tapar los ojos.
Una vez que tenemos preparados todos los recipientes taparemos los ojos de nuestro hijo y le ayudaremos a introducir las manos en uno de los recipientes. Nos tendrá que decir qué sensaciones tiene sobre lo que está tocando, cómo es el tacto, si está frío o caliente, si le gusta la sensación, y todo lo que se os ocurra que pueda resultar interesante para que exprese lo que está sientiendo.
Espero que lo practiquéis en casa y me dejéis en los comentarios qué tal os ha ido.
Nos leemos en la próxima entrada. Fuente de las imágenes: tomadas de Google imágenes.
A veces nos resulta difícil hacer entender a los niños que tenemos prisa, que no podemos llegar tarde o que hay que dejar lo que estamos haciendo porque tenemos que salir de casa o irnos del parque porque se hace tarde... Todo esto se debe a que en estas edades los niños aún no tienen desarrollado el sentido del tiempo.
Hoy os traigo un interesante artículo, Percepción temporal en niños, que nos habla de ello y que os puede ayudar como padres a entender un poco mejor cómo funciona el cerebro de vuestro hijo.
Además os dejo un ejemplo de cómo podemos trabajar dichas rutinas en casa. Entre todos podemos elaborar un cuadro de rutinas, en el que expondremos imágenes que muestren claramente las rutinas que queremos seguir en casa, de esta manera le estaremos ayudando a elaborar un esquema mental y temporal a nuestros hijos, nos sirve de apoyo visual muy claro y les da autonomía a la hora de poder predecir qué es lo que hay que hacer.
