En estos días de otoño en los que hace frío o llueve, no siempre es fácil que los más pequeños de la casa salgan a la calle a correr, a jugar y a gastar toda esa energía que tienen. Por eso hoy os traigo cómo hacer un circuito de psicomotricidad en casa sin tener que comprar nada, sino empleando elementos que que tengamos en nuestros hogares.
Este tipo de actividades, además de conseguir que se diviertan muchísimo, nos permite trabajar el control postural, el equilibrio, la puntería, mejorar la agilidad y sin duda pasar un gran rato en familia.
¿Qué podéis emplear para vuestro circuito? Pues aquí os dejo algunas ideas, pero podéis usar ¡todo lo que se os ocurra!
- Mesas pequeñas.
- Sillas.
- Banquetas.
- Cestos de la ropa.
- Pelotas.
- Cucharas.
- Juguetes.
- Cajas de cartón.
- Colchones o colchonetas.
Imagen propia. Con las mesas pueden reptar por abajo o si son un poco mayores pasar por encima. |
Imagen propia. Las sillas, cubos y juguetes os pueden servir para hacer juegos de zigzag. |
Imagen propia. Los bancos y colchones son geniales para saltar y ¡les encanta! |
Imagen propia. Las cucharas y las pelotas son estupendas para trabajar la coordinación y el equilibrio. |
¡Ya no hay excusas para no gastar energía en los días de otoño!
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